

No pretendo ser un tu ideal a quien admirar
ni mucho menos ser tu amigo
no busco tu piedad, ni deseo que pienses en mi
Pero si que sepas que soy como tú
siento lo que tu sientes, vivo lo que tu vives.
El recuerdo de tú dolor, remontando viejas ilusiones
siempre bañadas en sangre; levanto la mirada al cielo
lamentando en cada segundo arrastrar mis trémulas piernas
no quedan dudas que vivo en el infierno y aun sonrío cuando veo una lagrima
condenado eternamente a vivir en mi oscuridad, escondo mis deseos
en limpíos rincones, ellas me muestran todo.
Abrazado entre las sombras, extiendo mis alas al cielo
voy tras esa tu tierna carne, tu dulce sangre;
socavaré los rincones de tu mente,
infiltraré los de mi maldito destino en tus venas.
Mi existencia no la conozco ni yo,
pues negado estoy al reflejo de los cristales,
veras que existo con mi mente demente.
Y en una espera tan larga que ya no puede más
mejor sigo buscandote atí mi muerte
quiero tener el sueño eterno y jamás volver a ver más
quiero comenzar el día con el sol ausente
o simplemente amanecer sin recuerdos
parado frente a este mar de tinieblas
viendo como se ahogan mis sueños
y como florece más y más mi odio
junto a mi voz quebrante
mi cuerpo agonizado autodestruído
pero escuchando tu grito de misericordía
solo siento el abrazo de mi fiel soga
acariciando mi cuello cortado
esperando el llamado de las más oscuras neblinas
en este cálido frío del cementerio
iluminado por la gran luna......